sábado, 25 de abril de 2020

Inversión en educación

¿Inversión en educación? ¿Cuánto se invierte ello? ¿Cuánto se debería invertir? Si la educación es muy importante, ¿por qué a veces no se invierte tanto como se debería? 

Estas son algunas de las preguntas que muchas veces escuchamos y que da lugar a varias opiniones.
En general podemos decir que la inversión educativa en España ha ido en aumento en los últimos 25 años. Esto, lo hemos observado en torno a el Producto Interior Bruto y el Gasto Público del país. Tan solo cabe destacar una pequeña recesión entre los años 2009 y 2014 correspondiéndose con el momento de estancación del PIB lo que provoca un proceso similar en el gasto público ya que se genera menos dinero en el país.

Cuando hablamos del gasto público que genera la educación, comparamos el gasto generado en educación pública con la educación primaria y concertada. Las decisiones que toman los ciudadanos en cuanto a la educación, generalmente están relacionadas con el nivel socioeconómico del que proceden. En las zonas más pobres, el esfuerzo de la sociedad suele reflejar el deseo de que sus miembros adquieren más posibilidades y oportunidades de futuro. Por otro lado, en las zonas más desarrolladas, el Estado garantiza una educación con mayor calidad, la cual, puede condicionar las oportunidades futuras de los ciudadanos. Mientras tanto, las familias que proporcionan un mayor gasto educativo se inclinan por la educación privada, teniendo un mayor abanico de oportunidades y elecciones.

En función del tipo de centro educativo el gasto será mayor o menor. Por ello, se registran las siguientes cantidades:
  • Los centros públicos tendrán un gasto de 1.176 euros al año.
  • Los centros concertados los padres abonarán una cantidad de 2.617 euros anuales.
  • Los que acudan a colegios privados, pagarán una media de 6.171 euros anuales.
A diferencia de los públicos, los colegios concertados son «centros de estudio privados que reciben subvenciones por la administración». Por otro lado, los centros privados cuentan con una gestión meramente privada que determina el número de plazas en las aulas, siendo las familias las encargadas de abonar la cuantía que el centro decida.

Por otro lado, debemos saber que, aunque haya ido aumentando poco a poco, la inversión en educación es menor que la que había hace diez años. Esto se debe a que la inversión en educación no ha hecho más que caer desde comienzos del 2010 cuando se situaba cerca del 5% (del PIB). Este hecho es importante ya que, si la inversión educativa cae, el derecho a la educación se resiente. Esto se ha observado en los últimos años donde se han despedido a un gran número de docentes, el importe de las becas ha descendido y el número de alumnos pro cada clase ha aumentado. Otro de los problemas de la inversión educativa es la falta de recursos como equipos informáticos y actividades prácticas que ofrezcan dinamismo al aprendizaje.

Si estamos formando a los futuros trabajadores de nuestro país, ¿por qué no darles una enseñanza en condiciones para que están altamente cualificados?  Es por ello que es debe de invertir en lo realmente importante, en la formación de nuestros alumnos para que tanto maestros como profesores puedan atender adecuadamente a cada alumno.

A continuación dejo un vídeo muy corto que me ha llamado mucho la atención en el que se ve cómo el padre de un niño, no cree que invertir en educación sea una buena idea. Por el contrario, el niño sí piensa que vale la pena invertir en educación para formarse.


#InvertirEnEducación   #FormemosAdecuadamenteANuestroFuturo    #YoMeQuedoEnCasa

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